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martes, 7 de abril de 2015

POLONIA (I)

Mother of god! :O Soy una descastada, y no merezco vuestra clemencia. En mi defensa diré que poco tiempo me queda entre pasarme todo el día en el curro y gestionar sus perfiles de Twitter, Facebook y tal, para escribir cositas nuevas en el SusiBlog ^_^ Este post llega con un pelín de retraso. Aún así espero que lo disfrutéis igualmente.

En Agosto decidimos ir a visitar a un colega a su Polonia natal. Así que nos agenciamos unos billetes de avión y partimos rumbo a la Rzeczpospolita Polskatierras que vieron nacer a personajes tan ilustres e importantes como Copérnico, Marie Curie o Chopin. 




Estatua de Copérnico en Varsovia



Salimos del aeropuerto de Madrid (hacía pocas semanas que había estrenado su nuevo nombre: Adolfo Suárez Barajas) un día 7 de Agosto con rumbo Cracovia (Kraków para los puristas, antigua capital de Polonia) donde nos esperaba nuestro polaco favorito Mateusz Mateusz.  En el viaje pudimos gozar (antes de quedarnos tronzadísmos en nuestros asientos) desde la ventanita del avión, cuando las nubes nos lo permitían, de la grandiosidad de la cordillera de los Cárpatos.

Sobre las 18:30 Llegamos a tierras bálticas y ya nos esperaba nuestro amigo en el Aeropuerto de Balice Juan Pablo II. Desde allí cogimos un bus que nos levó al centro de la ciudad. 
Cracovia es una de las ciudades más antiguas y grandes de Polonia, y en el pasado fue el mayor centro económico, científico, y artístico del país. Ahora destaca por ser una de las ciudades más turísticas de Polonia.
































Matti (como lo llaman allí todos los colegas) lo tenía todo planeado y esa noche pernoctaríamos en Cracovia, en casa de unos amigos que compartían piso en las afueras de la ciudad, para coger fuerzas e iniciar el viaje que nos llevaría a Maniowy, un pueblecito de montaña a unos 100 km. de la antigua capital polaca. Allí pasaríamos unos día disfrutando de los paisajes de montaña, de las vistas y del aire puro. Después retornaríamos a Cracovia y desde allí tomaríamos rumbo a la capital: Varsovia. Una vez allí, turistearíamos un par de días y de allí de nuevo a Madrid. Un plan pulcro y sin fisuras, como el carácter polaco ;-)

Nuestra primera parada en Cracovia fue en el casco antiguo, donde estaba anocheciendo ya; Matt (como le llamamos aquí) nos dijo que deberíamos empezar a disfrutar del zumo polaco de cebada, idea a la que nadie se opuso, of course. El primer sitio donde arribamos era un barco-restaurante fondeado sobre las oscuras aguas del río Wisla (yo me reía sola imaginado a un kraken emergiendo de las profundidades y arrasando el barco-bar donde bebía la gente plácidamente) un lugar muy para turistas, pero se estaba muy a gusto, pues la gente allí es bastante más civilizada y menos maleducada que en España y no hablan a gritos cuando están sentados en grupo bebiendo. Allí decidimos, mientras a lo lejos sonaba “BOOOOMBAAA” de King África O_o (hecho de nos dejó estupefactos), que era un coñazo ir a dejar las maletas a casa de Karol para luego volver, de nuevo, al centro. Así que nos pusimos unas sudaderas, que ya empezaba a refrescar y nos bebimos un par de pintas.

Al terminarl las cervezas, nuestro cicerone particular, decidió llevarnos al centro histórico de la ciudad. Fuimos arrastrando nuestras pequeñas maletas por las empedradas calles cracovianas buscando un lugar para llenar la andorga, coger fuerzas y sobrevivir a la dura noche cracoviana.  En una pequeña terracita nos zampamos un kebab, que nada tiene que ver con la guarrería que nos dan aquí; y una vez terminado nuestro pequeño ágape, empezamos el tour nocturno por los garitos de Cracovia, bebiendo todo el veneno que Matt nos decía que teníamos por probar “porque allí era lo típico” (maldito bastardo XP).





1/2 litro de cerveza a 5 Zloty
Smoke Wawelski (Dragón de Wawel -Castillo de Wawel-)
Bazylica de Mariacka - Iglesia gótica en la Plaza del Mercado
Plaza del Mercado



Una de las esquinas de la Catedral de Wawel
Uniwersytet Jagielloński, donde estudió Copérnico


Sukiennice - Antiguo centro de comercio internacional, Plaza del Mercado en el casco antiguo (Patrimonio de la UNESCO)



La verdad es que nos lo pasamos muy bien probando las cervezas del lugar, a 5 Zloty , que al cambio es un poco más de un euro, cielo abierto para los grandes bebedores del lúpulo fermentado. Recuerdo que en uno de los garitos, decorado con vigas y mesas de madera sin barnizar, simulando tasca irlandesa, bebíamos tranquilamente nuestras cervezas, cuando comenzó a sonar una melodía familiar: “Por la raaajaaa de  tu falda…” Se hizo un silencio en nuestra mesa, mientras nuestras miradas iban a los ojos de unos y otros en el grupo. Rompí ese estado de shock con un golpe en la mesa:

- ¡Manda cojones! Venir a Polonia y tener que escuchar la misma mierda que en España. ¡Que me devuelvan el dinero!
- Es que lo español lo peta aquí.- Sentenció Matt.
- Creo que fue peor lo de King áfrica de antes- Decía Aarón sin sacar el hocico de su copa de cerveza.- A lo que los demás asentimos con la cabeza, levantando los vasos de medio litro y brindando a nuestra salud.


Salimos de allí rumbo a otro antro donde seguir bebiendo, con tan mala suerte que estaban cerrando ya. Viendo que poco quedaba que hacer por allí, Matti nos comentó que debíamos coger un bus que nos llevaría a casa de Karol. La fortuna no nos acompañó esta vez, pues ese bus pasaba cada hora. Fuimos callejeando hasta la parada, pero nosotros llegamos 2 min. tarde de la hora (improvisando como siempre, que se note que somos españoles, ¡coño!). 
Como teníamos una hora de espera hasta el siguiente bus, pillamos unas cervezas en una tienda que vendía veneno las 24 horas. Nos sentamos en el banco de un parque y empezamos a beber, mientras charlábamos y fumábamos. Al rato pasó una índigena del lugar por allí, con una botella de vodka de color piruleta en la mano. Se paró y se puso a hablar con Matt. Se dijeron una serie de cosas en polaco que luego nos tradujo nuestro amigo:

-       - ¿De dónde sois? - Preguntó la gemela de Kelly Osbourne cuando era gorda y gótica.
-       - Españoles. - Respondió Matt.
-       - Mira, me han dado esta botella de vodka y no me está gustando nada. ¿La queréis?
-       - Prueba con unos indigentes que hay en la acera de enfrente. - Le dice Matt señalando hacia nuestra derecha.
-       -  No tienes gracia tío-  dijo ella medio enfadada- Te la estoy regalando.
-     - Pues muy bien. Me la quedaré a cambio de que hagamos lo mismo que hacían los  emperadores romanos: la vas a probar tú primero. – Sentenció el polaco reclinándose hacia atrás en el banco y haciendo un gesto de llevarse una botella a la boca.

Ella le dio un trago y nos la dejó a nuestros pies mientras iba maldiciéndonos entre dientes. No podíamos para de reírnos. ¡Qué grande eres Matt! Decíamos entre carcajadas, mientras nos doblábamos de la risa y nos agarrábamos nuestras tripas buscando una bocanada de aire. Fue un epic win en toda regla. 

Por fin llegó el bus, puntual como un reloj suizo, y nos dirigimos hacia Wola Duchacka, barrio en  las afueras de la ciudad, donde compartían piso Karol y Karolina. 



__________________________________________________________


Entramos en el piso, y mientras Matt hacía las presentaciones pertinentes nos descalzamos en la entrada del piso, como vimos que hacía nuestro amigo. Nos presentó a Karolina, y nos dijo que Karol ya nos estaba esperando en Maniowy. 
Nos sentamos en unos sofás en la habitación de la improvisada anfitriona, nos abrimos unas cervezas y unas bolsas de patatitas, mientras Matt hacía de traductor con su amiga, y nos explicaba en qué consistirían los siguientes días del viaje: iríamos hasta Nowy Targ, donde cogeríamos otro bus que, por fin, nos llevaría hasta Maniowy. Allí nos alojaríamos en una casa donde la dueña alquilaba las habitaciones, y ese emplazamiento sería nuestro cuartel general durante 3 días. De ahí retornaríamos a Cracovia, donde buscaríamos medio de locomoción que nos llevase a Varsovia. Allí nos daría cobijo Damien, otro buen amigo de Matt, mientras visitábamos la moderna captial polaca y reuníamos fuerza de voluntad para terminar nuestro viaje y regresar al terruño.


 Pero todo este periplo lo dejo para un siguiente post  sobre Polska y tal:





 POLONIA (II): Rumbo a Maniowy













domingo, 15 de marzo de 2015

UNA DOCENA DE RAZONES POR LAS QUE ES MENESTER DESPELLEJAR “EL HOBBIT”


¿Porqué? ¿Porqué? Oh! Peter Jackson, ¿por qué has vendido tu alma al diablo con ojos en forma de símbolo de dólar? Ya fui benevolente con las “pequeñas” licencias que te tomaste con “El Señor de los anillos”, pero te las perdoné porque no metiste ni una canción en ninguna de las 3 películas y, para mi, eso fue de agradecer; también por elegir a Viggo Mortenesen para encarnar a mi personaje favorito de la novela. Pero lo de “El Hobbit” es imperdonable. Creí que un fan de la obra de Tolkien, director del gore más bizarro, “Braindead”, y de cosas tan jodidamente perversas como “Criaturas celestiales” tendría más criterio sobre un libro que es referencia para todo aquel que lea fantasía épica.




Y sin más dilación, comienzo el despelleje:

1. Trilogía: ¿En qué cabeza cabe semejante majader…? Oh, wait! Los fans. Ya… y mis cojones 33. Que te has vendido por un puñado de dólares, Peterjackson. Yo admiré tu arrojo al enfrentarte a la titánica empresa de la adaptación de una novela de semejantes proporciones como es “El Señor”, tanto por su denso contenido como por su importancia como clásico de la literatura universal y alta fantasía épica, y salir bastante airoso. Esta novela tenía razón de ser convertirla en una trilogía, pues así la concibió Tolkien; pero ¿este pequeño cuento cuasi infantil? Vamos, no me jodas.

2. Beorn: ¿Pero qué cojones es esto? Pensé nada más verlo en la pantalla. ¿Pero en que hostias estabas pensado Peter Jackson? Uno de mis personajes favoritos y ¿le haces esto? Te odiaré hasta el fin de los días. Según lo describe Tolkien, te lo imaginas como un hombre de enormes proporciones, fuerte y con una espesa barba poblando su rostro, como un híbrido entre hombre y enano, pero en versión 4x4. Pero no ese engendro, que me recuerda a Michael J. Fox en la peli de  “Teen Wolf”. Y como ya poco me hervía la sangre con esta pinta de hombre lobo cutre, vas y te lo pasas por el forro de los cojones y no le das la importancia que se merece y que tiene en el libro. Fuck off, Peter!

3. Radagast: Jaja, ji ji, que gracioso el viejo con la caca de pájaro en el pelo ¿que no? Pues, en la novela solo lo nombran, no sale. Punto y final.  

4. Tauriel: Vete a tomar por culo, Peterjackson. Esto ya sí que no. Nain, nain, nain! Pero ¿por qué inventas? No inventes. Si Tolkien pensó que en su historia no era necesario que hubiese ninguna fémina, pues respétalo, joder. Y para más inri creas una historia de amor imposible donde las haya: elfos y enanos, enemigos desde que el sol es sol. Ya me tuve que tragar el protagonismo innecesario de Arwen, en “El Señor”, y el pasteloso idilio con Aragorn; y ahora me vienes con esto.  ¡Arde en el infierno! Y todo lo que se le atribuye a este personaje creo (hace unos 20 años que leí este libro) recordar que lo hace Glorfindel; ese elfo que en las novelas molaba un puñao y lo han ninguneado en ambas trilogías, ¿porqueeeeeee?

5. Azog: un súper trasgo “tó ciclao”, WTF? Ya sé que hay que estar muy puesto para matar a Thorin Escudo de Roble, pero no creo que hubiese clembuterol por esos lares y tal. Ahora en serio. Primero: Azog no mata a Thorin, si no a Thror, su abuelo. Segundo: en esa época Azog lleva un tiempecito muerto, ya que la había palmado en la Batalla Azanulbizar a manos de Dáin Pie de Hierro. Y tercero: es su hijo Bolgo el que lidera a los trasgos en la Batalla de los Cinco Ejércitos. No tengo nada más que añadir, señoría.

6. Fili y Kili: Mis dos enanos favoritos, después de Escudo de Roble, of course. Y tengo que decirlo o reviento: no los mata el trasgo ciclado, si no que tienen una muerte más digna y épica, y que te has pasado por el arco del triunfo Peter. Mueren épicamente protegiendo a su tío Thorin a las puertas del Reino bajo la Montaña. Otra cagada gorda.

7. Legolas: En una palabra, sobra. En el “Señor de los anillos”, el director, ya dejó patente que tenía sueños húmedos con este elfo, cuando le dio un protagonismo excesivo. En esta película nos lo presenta siendo el más pajas entre los guerreros pajas de la Tierra Media, y atribuyéndole hechos de otro elfo. En “El Hobbit”, Peter Jackson ya no se corta, y su onanismo desmesurado con este personaje se eleva a la enésima potencia. Legolas se convierte en el Rambo de los bosques, ceño fruncido y repartiendo estopa con aires de malote, que sólo le faltaba que las puntas de sus flechas fuesen explosivas y que su padre fuese el Coronel Trautman.

8. Bardo: Personaje humano que me encanta y el actor que lo encarna, Luke Evans, también, por lo que no quería despellejarlo mucho. Así que esto es ya es ser picajoso y tocahuevos porque sí, pero bueno. Pues eso, que Bardo descubre como matar a Smaug porque se lo dice, aunque suene a coña, un pajarillo.

9. Aragorn: Ya sé que no es un personaje de este libro, pero viene al caso porque me parece un error grave. Cuando Thranduil (que no aparece en la novela) le pide a Legolas que busque a Aragorn (cosa que tampoco pasa en el libro), es algo un poco difícil, pues la historia de “El Hobbit” es unos 60 años antes que la de “El Señor de los anillos”, por lo que el montaraz sería un zagal en ese momento de la historia, y no viene al caso ir allí a darle la chapa con que es el heredero al trono y tal… menuda presión para el chaval.

10. La batalla: Tooooooda esa súper-ultra-mega batalla épica que le ocupa a Peter Jackson una peli de más de 2 horas, en el libro lo finiquitan en un capítulo. Para mí fue de lo más entretenida en el cine, ya que si hay que matar se mata, pero en el libro no es tan jodidamente homérica, es una batalla mucho más ligera, al fin y al cabo el libro fue concebido para niños.

11. El Rey elfo, Thranduil: El mal encarado, y demasiado tarado para mi gusto,  papi de Légolas. Pues otro que no pinta nada ahí, ni Tolkien lo menciona en la novela. Y yo me imagino la escena con Peter y sus coleguitas guionistas, Del Toro, Walsh y Boyens:

- Oye Peter, que vamos a sacarnos de la manga al Rey Elfo y tal, que mola mogollón.
- ¿Y eso porqué? - Pregunta atónito el director.
- Pues porque nos sale de la punta de la minga.
- ¡Ah! Pues vale.




12. Enanos: No entiendo esta dejadez. La compañía formada por enanos son el hilo conductor en el libro, son totalmente olvidados en la “La batalla de los Cinco Ejércitos” y quedan relegados a, ya no un segundo plano, si no casi a ser algo anecdótico. Los han desterrado totalmente de la historia. ¿Enanos? ¡Ah, si! Pasaban por allí y hacen coro a Escudo de Roble, y poco más. ¡Mal Peter, mal!


“El Hobbit” es una película innecesariamente larga, donde su protagonista, Bilbo Bolsón (un desaprovechado Martin Freeman), el jodido hobbit que le da nombre a la novela, ni más ni menos, es totalmente invisible. Los enanos, personajes con un gran carisma en el libro, aquí son presentados como unos bonachones y orondos enanitos, que van dando saltitos por ahí y diciendo gracietas, tipo David el gnomo, craso error; pues bien es sabido por los fanáticos de la fantasía épica que los enanos son una raza  de seres recios, corpulentos, robustos (no gordos), una estirpe orgullosa, algo tercos, tenaces y persistentes, son combatientes rudos y  valientes y les gusta pelear más que a un tonto una piruleta. Los frikie-fans (entre los que me incluyo), hemos echado en falta todo eso en los, desaprovechados, compañeros de Bilbo Bolsón, en esta épica historia. Peter Jackson ha hecho una trilogía entretenida de aventuras, pero un auténtico despropósito en cuanto a la adaptación cinematográfica.




lunes, 19 de enero de 2015

UNA DOCENA DE ATLETAS LEGENDARIOS QUE TODO “RUNNER” DEBERÍA CONOCER




Bueno, bueno, bueno. Vamos a ver. Aprovechando esta histeria colectiva que le ha entrado a la peña por ser “runner”, creo que este post es muy necesario. Todo el mundo conoce a Cristiano Ronaldo o a Pau Gasol, pero en el tema corredores están muy pez. Como ATLETA o CORREDORA (palabras en español que designa a la persona que corre) que soy desde los 9 años, recuerdo que el atletismo era cosa de una inmensa minoría, éramos raros porque “correr es absurdo y aburrido” y todos los corredores hemos tenido que oír alguna vez esa gilipollez de “correr es de cobardes”. Y ya veis, ahora es lo más. Como iba diciendo, muchos son los “runners” que andan por ahí sueltos, que controlan mil de apps de ponerse en forma, de dietas y complementos vitamínicos, pero que no conocen a los grandes atletas que forjaron épicas hazañas en este deporte. Sé que es imposible recordarlos a todos en una sola docena, pero espero que les guste mi elección:

1. Jesse Owens 

Se ganó el sobrenombre de “El antílope de ébano” en los juegos olímpicos de 1936,  en Alemania, por ganar 4 pruebas: 100 y 200 metros lisos, el relevo 4x100 y el salto de longitud, siendo el primer hombre en rebasar la barrera de los 8 metros. El propio Owens dijo que quería demostrar al mundo y al Führer, con esta hazaña, que la raza aria podía estar genéticamente preparada para muchas cosas, pero no para  este deporte.




2. Abebe Bikila

De origen etíope, abrió camino e inspiró a las futuras generaciones de corredores africanos. Ganó el maratón de Roma en 1960 corriendo ¡descalzo! ¡Descalzo 40km. por asfalto, joder! Una de las proezas del mundo del deporte que más me impactaron cuando era pequeña y mi padre me hablaba sobre este corredor. Cuatro años más tarde, en Tokio, volvió a conquistar la medalla de oro. Fue el primer atleta en conseguir ganar dos veces consecutivas el maratón en unos juegos olímpicos.




 3. Emil Zátopek


"La locomotora humana". A pesar de tener un modo de correr poco ortodoxo - el torso inclinado, los brazos muy altos y los codos muy separados del cuerpo - lo ganó todo en las carreras de fondo. Parecía que siempre iba al límite, pues tenía un correr muy agónico con una constante mueca de angustia en su rostro mirando al cielo. Lo que hizo Zátopek fue algo inaudito, y jamás nadie emuló tal proeza como la que realizó este checo en las olimpiadas de Helsinki 1952: ganar 3 pruebas batiendo, en las tres, los récords mundiales. Competir en tres pruebas de fondo no está al alcance de cualquiera. Digo esto, porque los atletas se especializan en una carrera y entrenan para ella, pues cada prueba tiene su metodología de entrenamiento y su técnica de carrera. Pero este hombre ganó el 5.000, el 10.000 y el maratón. Eso es una brutalidad. Creo que Zátopek debería estar en el Rankin de súper hombres de Stan Lee.

https://www.youtube.com/watch?v=3c4Z8cbcIiA






 4. Dorando Pietri

Para mí una de las imágenes más icónicas del atletismo del S.XX. Una de las mayores representaciones del tesón en la historia del deporte, del luchador que no se rinde, de aquél que va llegar a la meta cueste lo que cueste. Londres 1906, el italiano entraba en el estadio totalmente desorientado por la deshidratación, se derrumbaba sobre la pista de ceniza una y otra vez, los jueces lo ayudaban y le indicaban hacia donde tenía que correr. Dorando Pietri no se rinde y consigue llegar a meta. Pero no hubo un final feliz. Como no, la delegación tocahuevos estadounidense presenta una reclamación por la ayuda recibida a Pietri, que finalmente, descalifican. Aún así, la gran proeza de este pequeño italiano trascendió más que la victoria oficial de John Hayes, que no lo conoce ni Perry.





 5. Spiridon Louis

1986, el barón Pierre de Coubertin reinstaura los Juegos Olímpicos, los primeros de la era moderna; y qué mejor lugar para este evento que Atenas, cuna de las olimpiadas. El maratón aún no existía como carrera atlética, para ello se inspiraron en una leyenda sobre el soldado Filípedes, que cubrió 40 km. corriendo para llevar un mensaje; fábula muy épica sobre la que se forja el nacimiento de una de las pruebas más duras del atletismo moderno. El caso es que Spiridon Louis no tuvo nunca la intención de competir, pero tras la insistencia del coronel de su regimiento, participó en la prueba y la ganó. “El corredor humilde” le llamaron. Tras vencer lo único que le pidió al Rey Jorge I fue un carro y un burro para no tener que cargar él mismo con el agua hasta Atenas para venderla y ganarse la vida. Louis venció a corredores más experimentados y entrenados que él. Dominó la paciencia, la templanza y el saber dosificarse de un corredor de cierta edad, frente al ansia furiosa de los corredores más jóvenes.





6. Bob Beamon

Olimpiadas de México 1968. Esta ciudad está situada a más de 2.000 metros de altura, y eso implica que el consumo máximo de oxigeno es sobre el 90%, respecto a lo normal a nivel del mar; tod esto unido a las condiciones perfectas de viento hizo que se pulverizasen 9 récords del mundo. Se baja de los 10 y 20 segundos en las pruebas de 100 y 200 metros lisos respectivamente, Dick Fosbury asombra al mundo con su nueva técnica para superar el listón en el salto de altura, y Bob Beamon voló, literalmente, sobre la arena del foso: 8,90 metros. Una hazaña casi de otro tiempo. Imaginen el impacto de este salto (nadie superó los 8,19 en esa competición) en los otros atletas, en el público, en el propio Beamon que se desplomó sobre el tartán, presa de una euforia indescriptible. Bob Beamon hizo historia ese día, una historia que tardaría en superarse más de 20 años.

http://www.youtube.com/watch?v=DEt_Xgg8dzc





7. Carl Lewis

Ese correr elástico y potente, con esas zancadas enormes, hacen que parezca fácil lo que está al alcance de muy pocos. Un talento natural que le dio el sobrenombre de "Hijo del viento". Ha sido considerado el mejor atleta de todos los tiempos y ostenta el título otorgado por la IAAF de Mejor Atleta del S.XX. Durante 10 años fue el puto amo de las pruebas de velocidad y salto de longitud, e igualó la proeza de Jesse Owens, cuando ganó los 100 y 200 m. lisos, el relevo 4x100 y la longitud en Los Ángeles 84. En las siguientes olimpiadas, Seúl 88, Lewis gana el oro porque un Ben Johnson dopado hasta las orejas es descalificado. Él nunca estuvo contento con este modo de “ganar” ese título; pero en 1991 gana los 100 m. y deja patente que es el mejor. En ese mismo campeonato una de sus mejores gestas quedó sin el preciado oro, pero el espectáculo que dieron ese día Powell y Lewis fue algo que jamás olvidaré, mi padre y yo pegados a la tele alucinando bellotas. Todo lo que diga no haría justicia lo que ese día de 1991 pasó en el foso de arena, por eso os dejo un vídeo. Un auténtico duelo de titanes.

 https://www.youtube.com/watch?v=lfzUOKdd1YY







8. Said Aouita

En los 80 los keniatas copaban las pruebas de fondo y los británicos el medio fondo, hasta que llegó este marroquí y pulverizó todos los récords desde el 800 hasta el 5.000. Lo apodaron “La Gacela del Atlas”. Fue el único atleta que ha bajado simultáneamente  de 1´44´´ en 800 metros, de 3´30´´ en 1.500 metros y de los 13´ en 5.000 metros lisoscosa que lo convierte en el mediofondista más versátil de todos los tiempos.




9. Edwin Moses

¿Saben lo que fue ver las carreras de 400 metros vallas durante 10 años? Pues un aburrimiento. Sí, un hastío sin emoción alguna. Moses estaba en los tacos de salida y ya sabías quien iba a ganar. Era genial verlo correr y elevarse sobre las vallas, porque las vallas no se saltan, como muchos piensan, las vallas se pasan. Cuando tienes interiorizada la técnica (que es difícil de la hostia), y superas una valla casi rozándola, es que la estás pasando, no saltando. Los hombres, en el 400, deben superar 10 vallas de 91 cm. separadas por una distancia de 35 m. en 13 zancadas. ¡Zancadas de más de 2,5 m. y luego atacar la valla! Hay que entrenar mucho para hacer esto, y hacerlo bien. Fue dos veces campeón olímpico y batió en cuatro ocasiones el récord mundial hasta dejarlo en 47,02 en 1983.




10. Jordi Llopart

El primer atleta en ganar una medalla de oro para el atletismo español. Fue en los europeos de Praga, y luego en las Olimpiadas de Moscú consiguió la plata. La verdad es que la marcha era poco conocida e incluso mucha gente se reía de estos atletas al verlos entrenar, pero lo que estos ignorantes no sabían es que la marcha es la tecnificación deportiva del acto de andar y que tiene una gran complejidad motriz. Busco info sobre él y leo esto:

"El Europeo de Atenas'82. 40º a la sombra. Tuve un golpe de calor en el km. 15 y no me pude recuperar hasta el km. 25. Estando en última posición logré realizar los últimos 25 km. más rápidos que el campeón, pero solo pude llegar sexto…”

¿Solo? ¡Venga hombre! Eso es tenacidad y lo demás son tonterías. Como anécdota sobre los marchadores os contaré que buscando buscando topé con algo que me pareció de lo más curioso. ¿Os suena Abraham Stoker? Pues fue un marchador muy famoso del S.XIX, y que después de ganar todas las carreras en las que participó se dedicó a escribir. ¿A qué no sabéis que? Pues nada más y nada menos que  “Drácula”. ¡Sí! El gran Bram Stoker fue marchador ^_^ Mola.




11. Sebastian Coe

Este inglés posee 12 récords del mundo, y el único atleta que en menos de un mes batió los récords de 800, 1.500 y la milla; lo que lo convierte en el único atleta poseedor de éstos a la vez. Buscad algún vídeo de este corredor y observad su técnica de carrera, yo creo que es impecable: zancadas amplias, brazos y manos relajados, tronco erguido y cabeza alta mirando al frente. Verlo correr es una gozada, parece que no le cuesta, pero este hombre bajó de los 3´30´´ en los 1500.






12. Robert Korceniowski

Para la información sobre este marchador tiré de contactos. Le pregunté a mi amiga Laura, compañera de equipo durante muchos años,que no es moco de pavo todo lo que consiguió, pero como es atleta y no tronista, a nadie le importa...


Me recomendó que incluyese a este marchador polaco  por su hazaña de ganar en Sídney los 20 y 50 km. Leo en internet que fue dominador de la marcha durante 12 años y eso es una brutalidad. Esta disciplina me parece durísima, pues hay que ser muy firme mentalmente y  muy coordinado. Me cuenta mi amiga que él era su propio entrenador, muy bueno técnicamente, luchador incansable, que entrenaba mucho en España, que hablaba español (¡bien por Korceniowski!); que es gran persona dentro y fuera de la pista; y eso, queridos amigos, es otra cualidad muy importante para ser un gran deportista.





Como habréis visto en las fotos, en esas expresiones de sufrimiento y extenuación, el atletismo es uno de los deporte individuales más duros y exigentes, tanto mental como físicamente. Correr no es salir a la calle a dar saltitos vestido de tolai con un pulsómetro, y con toda la ropa más sofisticada del mercado “runner”. Correr es algo más serio que una moda pasajera, tanto sea como afición, por estar en forma, o en modo profesional. Sé que quedan muchos grandes atletas por recordar, pero es lo que pasa cuando debes hacer una selección entre tantos grandes  hombres y mujeres que hicieron colosales gestas en el atletismo. Como ya era difícil elegir solo 12, he pensado (si me dejan) en hacer otro post exclusivamente femenino; pues tanto las pioneras, que se enfrentaron a innumerables obstáculos para que las dejasen competir como a los hombres, como las grandes corredoras más actuales deben tener su propia docena.






sábado, 16 de agosto de 2014

ROBIN WILLIAMS, LAUREN BACALL Y JAY ADAMS


Una semana triste esta de Agosto. Mientras estaba de vacaciones, una mañana esperando un bus en un pueblecito en Polonia perdido de la mano de dios, un amigo leía las noticias y nos decía: 
- Ha muerto Robin Williams. 
-¿Robbie o Robin? Pregunté yo.
- Robin. Dijo marcando con dureza la N final. Nos quedamos callados un rato. 
- Joder, que pena, parecía un buen tío...
- Pues en pocos días la van a palmar otros 2 más. Sentencié yo. Y mis colegas me miraron con cara rara. Yo les dije que no sabía por qué pero que era así. Las celebridades se nos van de 3 en 3. 

Y así fue. A los dos días leo en Twitter la noticia de la muerte de la ultima divina de Hollywood, Lauren Bacall. Y ayer en el muro de mi colega Little Chris, veo colgada la noticia de la muerte del famoso skater y surfista Jay Adams, el puto amo de Dog Town, con sólo 50 y pocos tacos.






Robin Williams no era ninguno de mis actores favoritos, aunque sí un enorme aliciente en una cartelera para que yo me decidiera a ver una peli. Era un muy buen actor, y algunas de mis películas inmortales del cine hollywodiense moderno están protagonizadas por él: El rey pescador, Despertares, El indomable Will Hunting, El club de los poetas muertos y, por supuesto, la genial Good morning, Vietnam, con una banda sonora grandiosa y una de mis favoritas.

Algunas personas lo tachan de ser exageradamente histriónico. Puede que así fuera, pero también lo era Jack Lemmon y me encanta; pero éste tenía un modo más sutil de forzar los personajes, a mi parecer, y por ello me gusta más frente a los de Robin Williams. Tras esta reflexión, he de decir que si esas pelis no las hubiese protagonizado él, tal vez, no habrían sido lo mismo, les habría faltado carisma, pues Robin Williams iba sobrado de esto. y se la insuflaba siempre a sus persoanjes. Yo creo que todos sus persoanjes tenía algo de su verdadero yo; piensen por un momento en el locutor Adrian Cronauer de Good mornig, Vietnam. ¿Ya? Pues eso. La peli no habría sido tan genial sin sus forzadas imitaciones y el genial descontrol cuando canta como James Brown  I FEEL GOOD!!! OH YEAH, BABY!!! Si lo hubiese hecho otro actor, tal vez, ese personaje habría quedado en un locutor de radio tarado en la guerra de Vietnam.

Yo, personalmente, prefiero sus personajes más tranquilos, como el del psicólogo de El indomable Will Hunting; o el inolvidable John Keating, el profe de literatura de El club de los poetas muertos. "¡Oh! Capitán mi capitán", quién no ha recitado alguna vez este pequeño verso; quien no ha querido quitarle todo el meollo a la vida, quién no ha pensado en subirse a una mesa, a una silla, a una roca, para ver un problema o el mundo desde otra perspectiva... 

Grande Robin Williams. 




Luego llegó la noticia de la muerte de la última diva y divina de Hollywood, una de mis favoritas junto a otras de los años dorados de la meca del cine americano. Lauren Bacall, que siempre la recordaré como "la flaca", tenía algo que no poseían otras actrices de la época, ese aire lánguido pero a la vez insolente, sin llegar a la ordinariez descarada de Mae West; o esa elegante arrogancia que no está al alcance de cualquiera. 

Yo la descubrí, como no, en  la magistral Tener y no tener, diciéndole, con una mirada capaz de derretir el puto iceberg que hundió el Titanic, al duro de Humphrey: "¿Sabes silvar, no?" ¡Ole tus huevos, Lauren! Grandiosa. 
Cuentan que esa mirada felina, así de soslayo y media huidiza (por la que se ganó el apodo de "The look") y que acabó siendo su sello personal, no fue porque el personaje que interpretaba lo requiriese, si no que, como Humphey Bogart ya era una estrella en esa época, ella, con tan sólo 19 años se sentía intimidada y nerviosa, de ahí que lo mirase siempre así, tímidamente agachando un poco el mentón, y levantando los ojos para mirar a los de su partenaire. 
También me gusta mucho una peli que hace con Marilyn Monroe y Betty Grable, Como casarse con un millonario, donde saca su vena más frívola y divertida; y unos vestidos divinos de la muerte, y no sólo lo digo yo, también la academia de cine, pues fue nominada al Óscar como mejor vestuario. 

Siempre eterna Lauren...





Y para rematar el podio, llegó la noticia de la muerte del famoso skater Jay Adams. Otro genio que se va prematuramente, aunque viendo su aspecto actual no era de extrañar. 
Para los no duchos, Jay Adams fue un genio del monopatín, un visionario, un precursor del skateboarding moderno junto a su colegas Stacy Peralta y Tony Alva. Gente normal que nace con un don especial. 
Estos chavales aprovecharon una época de sequía terrible en California para colarse en todas las casas que tenían piscina, ya que permanecían vacías, pues estaba prohibido malgastar agua, y patinar dentro de ellas, haciendo verdaderas virguerías con el skate, siendo los precursores de nuevos movimientos inspirados en el surf; movimientos que aún se utilizan hoy en competiciones profesionales. 

Tampoco os voy a aburrir con datos sobre su vida, que podréis encontrar en internet. Como mucho os puedo recomendar la peli sobre la vida de estos chavales que marcaron un antes y un después en el mundo del skate: Los amos de Dog TownYo la califico de cine independiente, y aunque es una típica historia de colegas, de honor y lealtad, yo creo que es buena en cuanto localizaciones, vestuario, elección de los actores y el formato elegido para rodar, queda muy representativo y correcto para narrar una historia revolucionaria sobre la cultura del skate. 

El puto amo.






AÑADIDO EL 18 DE AGOSTO:

Y para los más puristas, y por tocadura de huevos de mi mentor Sir Brenan de la Hostia, os dejo el enlace del muy recomendable documental Dogtown and Z-Boys

http://www.teledocumentales.com/dogtown-y-z-boys/